Huanglong, es otro parque natural can características muy particulares, que se encuentra en nuestra Ruta del PseudoTibet, aunque tampoco pilla de paso.
Está relativamente cerca del parque de Jiuzhaigou, y aunque es de menor calibre que aquel, no por ello deja de ser alucinante.
Al igual que el parque de Jiuzhaigou, está también muy masificado. Al tener un área más pequeña, la concentración de turistas es más densa, por lo que los amantes de la tranquilidad y de los lugares solitarios tendrán que cambiar a fechas más intempestivas, o saltarse esta etapa.
Su
nombre viene del rio central que discurre por su valle, cuyo fondo está
compuesto por un tipo de material formado por carbonato
cálcico y que por la reducción del oxígeno a una altitud de 3.000 m., se vuelve
amarillento. El manto de agua que corre valle
abajo hace que recuerde a un Dragón Amarillo (Huang Long, 黄龙).
Pero lo mejor está en su parte más alta. Allí se hayan una serie de pozas de calcita rebosantes de agua, las cuales por mezclas de reflejos de colores, son de un turquesa irreal, pero de un encanto sublime. Esto convierten a este parque en uno de esos extraños lugares casi de otro
planeta.
Recomendaciones:
- El relato de la visita con detalles está en la entrada de Huanglong del Blog "A China Sin Cuentos".
- Con buena forma física, la visita se puede hacer en unas 3 horas sin problemas, no añadiría más de una 1 hora extra para un mayor disfrute, ya que este parque es más bien pequeño, y los miradores fotográficos son más bien pocos.
- Una buena cámara de fotos no estaría mal.
- En primavera puede que las pozas estén aún llenas de nieve. En verano es la época ideal, pero en Otoño se hace menos agobiante por el turismo.
Vaya pozas tío, parece las de Pamukale en Turkía.
ResponderEliminarPues si, precisamente pensé lo mismo cuando lo vi. Aunque yo no he estado en Turkia conozco por fotos esas pozas.
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